- Evolución del los carteles y el logo.
- Menú a lo largo de los años.
- Cómo han evolucionado las mesas de juego.
- Partidas largas temáticas.
- Tradiciones tontas.
- X Aniversario.
- Evolución del los carteles y el logo:
Al principio la idea era hacer una colección de carteles para hacer distintas temáticas y colocarlos enmarcados en la sala de juego creando un mural.
Los tres primeros años se hicieron carteles con una pin-up portando un casco corintio y cocinando a la brasa con una espada. Tenía más imágenes preparadas para ampliar la colección hasta 5 diferentes, pero la forma de anunciar la Warbacoa cambió, y el tema de las colecciones de carteles quedó abandonado.
Para la quinta edición ya se creó el logo actual de la propia Warbacoa, que aparecería en los banner del facebook hasta el séptimo año.
De ahí en adelante el evento paso a anunciarse solamente en whatsapp, creando un grupo ex profeso para ello y siendo simplemente el logo la imagen del grupo de cada año.
El logo facilita la creación de merchandising, y se ha usado para crear tazas, bolsas, cojines, y hasta jarras de cerveza conmemorativas.
- Menú a lo largo de los años:
El plan era ponernos hasta arriba de carne a la brasa, para que vamos a andarnos con rodeos. Así pues, el primer año el menú básicamente consistía en mucho cordero a la brasa, y algo de longaniza y panceta para acompañar. Para empujar por el gaznate tanta carne, el menú se complementó con queso, pimientos asados, ensalada de cebolla y poco más. Eso si, lacitos de hojaldre de postre.
Para el segundo año, la proporción de carne fue mayor que el anterior, y a parte del picoteo, se decidió meter un primer plato para que nadie se quedase con hambre, eso sobre todo. Ese primer plato fue la escalibada. Aquí el menda se levantaba a las 5 de la mañana este año y los siguientes, para asar al horno, pelar y trocear pimientos, patatas, cebollas y berenjenas para que a la hora que llegase la gente estuviera todo listo con las anchoas añadidas y poder jugar con ellos.
El tercer y cuarto año se mantuvo el menú tal cual (se añadió chorizo, que los años anteriores no había), pero para el quinto año, la carne y la verdura subieron una barbaridad de precio. Hasta ahora, habíamos salido a 7€ por cabeza todos los años y yo no quería cambiar esa tónica, así que se decidió cambiar la escalibada por ensaladilla rusa que salía mucho más económico, y además, siendo siempre la warbacoa en verano, la ensaladilla fresquita entraría muy bien.
También se redujo la cantidad de cordero por el incremento de precio, pasando a ser la ración de carne una chuleta de cordero, una longaniza, un chorizo y un trozo de panceta para cada uno. Siempre sobraba algún trozo de algo por si alguno quería repetir. Se añadió más variedad a los postres, y con todos estos cambios el precio paso a ser de 10€ por cabeza.
Mantuvimos el menú hasta el noveno año, cuando la ensaladilla paso a costar EL DOBLE de repente, así que optamos por abaratar más el primer plato (que pasaría a ser ensalada de pasta) manteniendo igual todo lo demás, pero aun así los precios en general habían subido, por lo que a partir de este año empezamos a salir por 15€ por cabeza.
De momento y mientras se pueda se intentará mantener el coste a 15€ por cabeza, que teniendo en cuenta los tiempos que vivimos me suponen auténticos malabares, ya que no solo son para la comida, también el desayuno, el picoteo, la cena para el que aguante, la bebida para todo el día, la leña, los vasos y platos, etc...
- Cómo han evolucionado las mesas de juego:
Los primeros años nuestra escenografía era muy rudimentaria y clásica de mesa de Warhammer montada casi siempre sobre tableros pintados con spray. Incluso el primer año pinté a primera hora de la mañana alguno de esos tableros mientras esperábamos a que llegase la gente.
Poco a poco fui ampliando y modernizando mi colección de escenografía, y tengo que agradecer a los chicos de Azero Candente los cajones con casas de resina que trajeron durante años para complementar con nuestra escenografía.
Luego llegaron los tapetes de lona de PVC y el aspecto visual de las mesas dio un salto brutal, esto ya era otra cosa.
Pero sin duda el salto más espectacular ha sido la escenografía urbana, tanto para Infinity, Batman como Zombicide, cuyas primeras mesas eran de cajas de empalmes eléctricos o simples losetas urbanas, pasaron por edificios de papel que hice en el photoshop, y han llegado a una fantástica ciudad en tres dimensiones.
Tengo en marcha interesantes proyectos para mejorar las mesas. Mesas de ciencia ficción, de mazmorra, de fantasía medieval, de bosque... no se cuantos años me costará terminarlas pero la cosa no va a parar de mejorarse año tras año, os lo puedo asegurar.
Desde la novena edición de la Warbacoa se viene preparando una partida de normalmente larga duración (entre 3 y 5 horas) a algún juego temático con las reglas muy modificadas por mi para adaptarlo con nuevas mecánicas o darle un plus de realismo. En la novena y décima edición ese juego fue Zombicide, y en la undécima fue una adaptación de Alien al sistema del Core Space.
Estas partidas siempre están llenas de momentos épicos, risas y tensión, lo que las convierte en una de mis actividades favoritas del día. Además, ¡disfruto muchísimo preparándolas!
Tengo muchas ideas para seguir con estas partidas: misiones del Core space con los Guardianes de la galaxia, una minicampaña del Exploradores de las Profundidades Sombrías con un personaje arquetípico de D&D por jugador, más Zombicide... hay material para muchos años :)
A lo largo de estos años hemos intentado crear y mantener ciertos rituales para convertirlos en tradición.
La tradición más arraigada es comer lacitos de hojaldre de postre y con el café, y me dolió en el alma tener que faltar a esta tradición en 2020 porque a causa del coronavirus no pude conseguir los lacitos de ninguna manera.
Los primeros años existía el ritual de jugar una partida de Infinity Manuel vs Néstor, que casi era la única partida que jugábamos al año, así que había que aprovechar mientras se pudo, que fueron unos cuantos años. Al igual que esto, tampoco podía faltar el tradicional partido de Blood-bowl de Sergio vs Iván.
Otra de las tradiciones es el esperado posado con sombrero de paja de Manolo, que desde que asiste a la Warbacoa es algo que no puede faltar. Hasta el año que no pudo asistir por culpa de un dichoso virus tuvimos que buscar como no perder esta ya arraigada tradición y buscarle un suplente, jajaja.
Otras cosas ya tradicionales son encontrar a Alberto durmiendo en posturas o lugares extraños a mitad de mañana o a media tarde (que no veáis que susto el primer año que lo encontramos largo en el suelo ¬¬) y mi favorita: estar expectantes en el patio para ver como los nuevos de cada año se golpean la cabeza con el techo al bajar las escaleras. Ha habido golpes estremecedores en alguna ocasión, no D.E.P. pero casi.
Para la conmemoración del X Aniversario quería preparar algo especial. Habría una ginkana y un sorteo, así que como alguna que otra sorpresa.
Todos recibirían la copia de una carta con un texto de agradecimiento de un supuesto noble hacia el señor de la casa. En esa carta había escondidas cinco pistas que tenían que resolver para encontrar una clave (tras un cuadro, bajo una mesa, tras una estantería, etc) que deberían recitar a los anfitriones, los cuales, si la clave era correcta, le entregaríamos una carta representando un artefacto que incluía unas pistas con las que resolver un enigma.
Al juntar todos los artefactos tras resolver todo lo encriptado en la carta del noble, tendrían que resolver el enigma que formaban los artefactos al ordenarse correctamente antes de las 19:00. Quien lo consiguiera tendría una recompensa especial y todavía desconocida.
La recompensa era poder escoger el primero entre un montón de cosas y juegos que había para sortear (además de participar aun así en el sorteo, teniendo premio doble).
También hubo otro minijuego secundario, que consistía en encontrar pequeñas cartas con artefactos tecnológicos que estaban escondidas por todas partes. Antes del sorteo, el que más hubiera conseguido, podría escoger después del ganador del otro acertijo pero antes del sorteo, aunque solo podría escoger cosas pequeñas.
A las 19:00 tuvo lugar la resolución y el sorteo. Antonio consiguió descifrar el enigma (un número formado por la fecha de la primera y última Warbacoa) casi en el último minuto, por lo que escogería premio el primero. Tito consiguió, y no siempre de forma limpia xd, la mayor cantidad de artefactos tecnológicos, por lo que escogería el segundo. Y ya si, después de esto, tuvo lugar el sorteo. Los participantes que habían asistido a todas las Warbacoas sin faltar ni una sola vez tenían tres papeletas en el bombo, los que habían asistido al menos seis veces dos papeletas, y el resto una, pero esto solo influiría en las probabilidades de elegir primero, ya que había un premio a escoger para cada uno.
Además de todos estos juegos y premios, quise tener un detalle con las personas que no habían faltado nunca y que además siempre han ayudado a realizar las compras, montar todo, y recoger. Antonio y Sergio recibieron una jarra conmemorativa del X Aniversario como agradecimiento. Gracias, chicos ;')
